La velocidad de respuesta podría llevar a que para final de año se empiece a recuperar el empleo. FOTO: Colprensa.
El desempleo en Colombia ya venía moviéndose a doble dígito y ahora, además, sufrirá los efectos del virus. En Valle de Aburrá, un estudio de la Universidad de Antioquia reveló que se podrían perder entre 77.339 y 88.902 puestos de trabajo.
Mauricio López González, coordinador del grupo de macroeconomía aplicada de la UdeA, dijo que “esta es una crisis diferente, en la que se pone a prueba la capacidad de adaptación de nuestros empresarios. La velocidad de respuesta va a ser alta y para final de año va a haber empleos que se estén recuperando”.
Por lo pronto, en ambos escenarios, los puestos de trabajo informal son los que más afectados se verían (ver Gráfico). En concordancia con esto, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que “las consecuencias para las actividades generadoras de ingresos son especialmente graves para aquellos trabajadores de la economía informal que carecen de protección”.
En cuanto a los sectores más golpeados, señala la UdeA, se encuentran hotelería y turismo, los cuales tardarán más tiempo en mostrar una recuperación tras disminuciones de masa laboral de hasta 8,2 %. No obstante, se percibe que la construcción y las industrias manufactureras serán dos segmentos que pueden generar más puestos, mientras los otros vuelven a la normalidad.
En la actualidad, las empresas trabajan para proteger el empleo. Luego del llamado del Ministerio de Trabajo, más de 100 empresarios buscaron mantener el empleo de 41.871 personas, amparados en las medidas anunciadas.
Mitigación de pérdidas
La OIT, por su parte, propone un marco de políticas para hacer frente a la destrucción de puestos de trabajo que se ve a partir de la pandemia. Esta se basa en cuatro pilares: estimular la economía y el empleo, apoyar a las empresas, el trabajo y los ingresos, proteger a los empleados en el lugar de trabajo y buscar soluciones mediante el diálogo social.
Frente a este panorama, calificado como “sumamente incierto”, la Organización subrayó que “ha habido una respuesta rápida e históricamente amplia a nivel político” para proporcionar alivios a quienes lo necesitan, bien sea empresas o personas.
Por su parte, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentó perspectivas de la región (ver Informe) y llamó a la integración para ser más fuerte en un escenario después de la pandemia, dependiendo menos de las importaciones, promoviendo redes de producción entre los países de la zona y generando una gobernanza más inclusiva (ver Informe).
Información tomada de: www.elcolombiano.com